Cruzar Fronteras, Abrazar Vidas: nuestra ternura, nuestra resistencia | Por Bea Is

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Cruzar Fronteras, Abrazar Vidas: nuestra ternura, nuestra resistencia

Bea Is, Fundadorx de la Asociación Peruana de Personas Intersexuales (Perú Intersex)

Esta vez la vida me permitió cruzar líneas limítrofes en las que anteriormente había sido observada con desprecio y obligada a regresar al lugar de donde partí. Esta vez fue diferente, gracias al esfuerzo e ímpetu de amigxs, aliadxs y otras orquídeas que forjaron junto a mí la lucha por hacer todo lo necesario para que pudiera reunirme con ellxs.

Ha sido emocionante conocer la cultura en la que habitan mis hermanxs mexicanos, su sociedad, sus costumbres; explorar esta realidad en la que conviven a diario y en la que se enfrentan constantemente a desafíos por ser quienes son. Desde mi llegada me he sentido muy acompañada: me recibieron amigxs preciadxs y personas que en ese momento veía por primera vez, pero que, a lo largo de mi estadía, se han convertido en personas queridas para mí.

Concuerdo con muchxs otrxs activistas en que este camino es muy solitario, y muchas veces me he sentido solx al poner el cuerpo frente a las diversas actividades que realizamos desde Perú Intersex. Sin embargo, algo que no esperaba era que muchas de las personas con las que compartí en México me tenían un gran aprecio, aunque yo no las conocía. Su aprecio da sentido al trabajo que realizo y fortalece mi decisión de llevar con orgullo mi barba y el vello en zonas del cuerpo atípicas para la mayoría de las mujeres, y, con ello, enfrentar a la sociedad que lo tilda como negativo.

No tenía idea del impacto ni de la cantidad de personas que ven mi trabajo. Su aprecio me llena el corazón.

Con cada orquídea con la que compartía, de alguna manera me sentía reflejada: algunas se cubrían la barba, como lo hacía yo años atrás; otras habían sido señaladas y discriminadas en ámbitos públicos; incluso el núcleo familiar era un espacio de señalamientos. Me daba mucha tristeza escuchar su dolor. Sentí que esas juntadas eran espacios seguros donde podían exteriorizar todo aquello que les dolía y, al mismo tiempo, juntas nos dábamos fuerza, nos abrazábamos y nos brindábamos la ternura que esta sociedad nos niega por el hecho de ser diferentes.

Recuerdo lo desafiante que ha sido para mí conectar con mi cuerpo, aceptarme tal cual soy, reconectar y sentir que este cuerpo con el que nací es hermoso tal como es. Estoy segura de que esto también lo atraviesan muchas otras personas, en particular las orquídeas.

Merecemos ternura, risas y celebrar nuestro cuerpo tal como es. Una de nuestras juntadas terminó en una discoteca ubicada en la Zona Rosa de la Ciudad de México. Fue la primera vez que me encontré en un escenario así, junto a otras orquídeas. Fue hermoso ver cómo cada unx disfrutaba de su cuerpo, moviéndolo al son de la música, expresando con su corporalidad la alegría del momento. Me sentí segura al estar rodeada de tantas orquídeas. Verles disfrutar y ser ellxs mismxs me llenó de felicidad.

A veces, los paisajes más bellos también tienen nubes grises.

Hubo días en los que me sentí muy triste por una situación en la que me comprometían negativamente desde otras latitudes. Gracias a la vida, estuve todo el tiempo acompañada por mi amiga Laura Inter, Mar y Eva, quienes me dieron el soporte para atravesar esa situación tan injusta.

Pese a ello, no dudé en seguir concretando todas las actividades propuestas con la comunidad. Una de ellas fue un conversatorio titulado Tejiendo puentes: diálogos entre Perú Intersex, Brújula Intersexual y Seminario Intersex, dirigido a académicxs de la Universidad Autónoma de Querétaro. Tuve el placer de compartir la mesa con Fabi en un espacio hermoso, lleno de personas muy interesadas en la temática intersexual y comprometidas a generar un cambio desde el lugar en el que están.

Estoy profundamente agradecida con la comunidad intersexual mexicana, con las personas académicas que asistieron al diálogo, con Seminario Intersex y Brújula Intersexual por su cálida compañía.

Me llevo risas, abrazos, aplausos y nuevos amigxs. Definitivamente, mi visita a México ha sido uno de los mejores viajes que he tenido, gracias a la calidez de su gente y también a su deliciosa gastronomía.

Encuentros con la comunidad intersexual mexicana en CDMX y Bajío

Conversatorio en la Universidad Autónoma de Querétaro – Tejiendo puentes: diálogos entre Perú Intersex, Brújula Intersexual y Seminario Intersex

Juntada de orquídeas, Zona Rosa – CDMX

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